"Starship Troopers", es
una novela de ciencia ficción escrita por Robert A. Heinlein. A través de los ojos de su
protagonista, el autor examina moral y filosóficamente aspectos relacionados
con el sufragio, la virtud civil y las necesidades de la guerra y la pena
capital. Es un libro con un discurso sorprendentemente profundo, con un par de
ideas que creo vale la pena discutir (y desmentir)
1.- Sobre la Democracia
La sociedad que describe
Heinlein, funciona como una democracia representativa, con la particularidad de
que sólo los veteranos de guerra tienen derecho a voto. La justificación es que
el veterano tiene la capacidad de anteponer el bien general al particular y que
ha demostrado esa capacidad durante sus años de servicio como militar,
sacrificándose por el bien de la generalidad.
El argumento es sorprendentemente
engañoso. No sólo porque la persona pudo haber entrado al la milicia por muchas
otras razones aparte de la de proteger a la comunidad en la que vive (algunas razones
pueden ser incluso sorprendentemente egoístas) sino porque aun si todos buscáramos
el bien común antes que el propio, no se resuelve el problema principal de la
democracia. ¿Quién decide qué es mejor para todos? Mientras yo creo que
mercados e individuos más libres son la vía para el desarrollo, otros opinan
que se debe tener un gobierno central, regulador. ¿Cómo resuelven las
diferencias de opinión en la sociedad utópica de Heinlein?
2.- Sobre la Autoridad del Votante
"Permitir una autoridad
irresponsable es sembrar para el desastre. Hacer a un hombre responsable por
algo que no controla es ciega idiotez." explica uno de los personajes
"Las democracias ilimitadas eran inestables porque sus ciudadanos no se
hacían responsables por la forma en la que ejercían su autoridad soberana [...]
Nunca se hizo un intento por determinar si un votante era socialmente
responsable por su ilimitada autoridad. Si vota por lo imposible, lo
desastrosamente posible sucede en su lugar y jamás se le hacía responsable, lo
que acababa por destruirlo a él y al sistema que lo empoderaba"
Aquí coincido con el autor. La
responsabilidad, en un gobierno democrático, o se diluye entre todos sus votantes o se personifica
en el gobernante en turno, nunca en la gente que vota por él. Bajo un gobierno democrático no nos
reconocemos responsables de nuestro destino y por lo tanto no ejercemos nuestra
autoridad con la seriedad que deberíamos. No investigamos antes de votar, no
damos seguimiento, no reclamamos.
3.- Sobre la Violencia
"¿Que la violencia no
resuelve nada?" pregunta otro de los personajes "Estoy seguro que los
patricios de la ciudad de Cartago estarán encantados de oírlo. Te recomendaría
invocar a los fantasmas de Napoleón Bonaparte y el Duque de Wellington y ponerlos
a debatir el punto. Hitler podría ser el moderador. [...] La violencia, la fuerza
bruta, ha decidido más cuestiones en la historia que cualquier otro factor."
Esta aseveración es un
despropósito. Una demostración de violencia quizá podría ser un paliativo, un
disuasorio poderoso para imponer tu opinión o ejercer control, pero depende
directamente de que mantengas esa capacidad para usar la violencia de manera
efectiva. No "decide" las cuestiones. En toda la historia de la
humanidad no hay imperio que haya conseguido imponer eternamente su hegemonía.
En algunos casos, incluso, se les venció directamente con la aplicación de
métodos no violentos, o cayeron bajo el peso de mantener esa maquinaria bélica
en funcionamiento. Un estado que depende del ejercicio efectivo de la violencia
será inherentemente inestable.
Y usted lector ¿Ha leído el libro? ¿Con qué ideas comulga, con cuales está en desacuerdo?
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