jueves, 10 de agosto de 2017

Lo cortés no quita lo valiente

El Washington Post reprodujo y difundió esta semana transcipciones íntegras de las conversaciones telefónicas que Donald Trump sostuvo con los mandatarios de México y Australia a finales de enero de éste año. Dando comienzo así a una semana de tragedia para el presidente norteamericano.


Por supuesto que con el puro texto, no puedo sino imaginar el tono y cadencia que adoptó Trump en su charla con el presidente Peña; pero si a mi me lo preguntaran, yo diría que el multimillonario que ahora despacha en el Salón Oval estaba desesperado. Una opinión sin duda contrastante con lo que en su momento algunos medios nacionales pretendieron hacernos pensar (Dolia Estévez, por ejemplo, utilizó los calificativos “humillante” y “amenazante” para referirse a la actitud del estadounidense.)


Si, Trump arranca fuerte diciendo que pensaba seriamente imponer aranceles a todos los productos mexicanos; utiliza técnicas interesantes para menguar la autoridad de su interlocutor durante la conversación, como dirigirse a él por su primer nombre, “Enrique” (que aunque es cada vez más frecuente en la iniciativa privada, sigue siendo muy extraño escucharlo en charlas diplomáticas), e incluso interrumpe en un par de ocasiones al presidente Peña.  Pero nada de eso importa porque la amenaza de los aranceles.


Pero, al leer la conversación completa y ver cómo suelta datos al azar, falsos o fuera de contexto y sin relevancia: su campaña, el tamaño de sus mitines, su victoria electoral con el voto latino, el déficit intercambiario que tiene con México (y que todos los expertos señalan que no es algo malo para Estados Unidos per se), las fábricas que se han perdido por mudarse a México (y los ejemplos que puso son de producciones que se mudaron a otros estados, dentro del mismo Estados Unidos) Uno se da cuenta de que es, verdaderamente, el mismo bocafloja de poca sustancia que vimos en campaña.


Quizá la evidencia más reveladora de la efectividad de este “tremendo negociador” sea el tema del mentadísimo muro; tema que Peña intentó superar una y otra vez, ofreciendo dejar de hablar del tema en público y girar la atención a otras áreas en donde pudieran mostrar logros de la relación bilateral.

Trump: El hecho es que estamos los dos atorados políticamente, porque yo necesito que México pague por el muro. Lo necesito. He estado hablando de ello por un periodo de dos años.
Peña: Esto es lo que propongo, Sr. Presidente, dejemos de hablar del muro. He reconocido el derecho de todo gobierno a proteger sus fronteras como crea necesario y conveniente. Pero mi posición ha sido y seguirá siendo muy firme diciendo que México no puede pagar ese muro.
Trump: Pero no puedes decir eso a la prensa. La prensa tomará eso y yo no puedo vivir con eso. No puedo negociar en esas circunstancias.
Peña: Entiendo este punto tan crítico para usted y su país, Sr. Presidente. Busquemos maneras creativas de solventar el obstáculo. [...] Para México es algo que va más allá del tema económico porque es un asunto relacionado con la dignidad de México y con el orgullo nacional de mi país.
Traducción propia


No sé. ¿Le parece esto agachón, le parece que Peña no defendió los intereses nacionales? ¿Que se vió tibio? No soy ningún experto en diplomacia internacional, pero a mi me parece una muy razonable posición la del presidente. ¿O qué preferiría? ¿Franca oposición? ¿Aún viendo el ejemplo de Corea del Norte, que abiertamente se le opone y al que amenazan con “furia y fuego”?
Por una vez, creo que el presidente lo ha hecho bien y creo que esta será la manera correcta de lidiar con Trump mientras dure su mandato. Después de todo, bien dicen que lo cortés no quita lo valiente.


Si usted quiere leer toda la conversación, puede hacerlo en la siguiente liga:

jueves, 3 de agosto de 2017

La medalla de la maternidad.


Aunque sin duda queda mucho camino por andar, es innegable que las mujeres han hecho progresos agigantados en su lucha por conseguir derechos civiles igualitarios, salarios más justos y una presencia más notable en puestos directivos y gerenciales en empresas de todos los tamaños. La liberación femenina también ha impulsado a muchas niñas a perseguir sueños que antes parecían restringidos para varones: convertirse en astronautas, presidentas, científicas, notables deportistas etc.


Que haya mujeres notables rompiendo fronteras y haciendo historia me parece maravilloso. Creo que las damas, como los caballeros, tienen derecho a hacer cuanto esté en su mano para perseguir su felicidad. Si encuentran esa dicha y autorealización en el entorno profesional, genial. Lo que ya no me parece tan genial es que, derivado de esta misma liberación, de pronto exista un estigma en una de las labores más trascendentales que una mujeres puede desempeñar en una sociedad: la de ser madre y formar a una familia. (formar en ambos sentidos, la conformación física de la familia y el desarrollo educativo y humano de sus miembros)

Esta semana, la marca de bebidas deportivas Gatorade publicó una imagen en Twitter en donde felicita a Paola Espinoza, notable clavadista mexicana, por el reciente nacimiento de su hija Ivanna. “Paola, felicidades por obtener la medalla más grande de todas: ser mamá”, rezaba el desplegado.

La reacción de algunas feministas en redes sociales fue nefasta y virulenta. Se atacó a la marca por todos lados. Se calificó el mensaje de sexista, machista y “heteropatriarcal”. Basten dos botones como ejemplo:





Perdón, no. Lo han entendido todo mal. Creo que lo que se está minimizando no es a Paola, que es una mujer extraordinaria que ha alcanzado soberbios logros deportivos. Lo que las feministas están tratando de minimizar es la maternidad. Para estas chicas aparentemente dar la vida por formar a una nueva generación, por asegurarse de que sea gente de bien, por brindar estabilidad y cariño a un ambiente que le permita a ella y a otros cercanos a ella desarrollarse y crecer… aparentemente nada de eso vale.

El ser humano, desde sus orígenes cavernarios, mucho antes de que se instalara cualquier tipo de “sociedad moderna” valoraba y veneraba figuras maternas. Las mujeres en su rol de madres han sido, son y serán transformadoras de la sociedad, con un efecto más silencioso pero tanto o más poderoso que el de cualquier pensador social, guerrillero, reformista o dictador.

Que haya mujeres que no quieran enfrentar este reto, o que prefieran brillar en otras esferas está muy bien y lo aplaudo. De hecho, mejor así. Para ser una buena madre se requiere vocación, querer ser madre, sacrificio completo al mejoramiento de la sociedad, de hombres y mujeres. Es un rol que muchos hombres no hemos querido aceptar del todo, pero que es tan valioso que bien deberíamos ir integrándonos más.

Lo que no pienso permitir es que, en su afán por darse importancia, estas falsas feministas menosprecien el trabajo que millones de madres realizan en beneficio de todos, con un amor que nadie puede igualar. ¡Gracias mamás!


“Enseñarás a volar, pero no volarán tu vuelo. Enseñarás a soñar, pero no soñarán tu sueño. Enseñarás a vivir, pero no vivirán tu vida.Sin embargo.., en cada vuelo, en cada vida, en cada sueño,perdurará siempre la huella del camino enseñado.”

-Madre Teresa de Calcuta-


Addendum
Por cierto, lo que usted y yo opinemos de la experiencia de Paola, y de si la maternidad es o no es su más grande medalla pasa a segundo plano. Es finalmente ella la que tendría que valorar si lo es o no. Y para nuestra fortuna, ya se ha decantado al respecto:

jueves, 27 de julio de 2017

Congruencia

Cada semana cuelgo en este espacio un pequeño texto en donde abordo, y muchas veces reclamo, el nefasto papel que nuestros “gobernantes” hacen desde sus curules, palacios de gobierno y a veces hasta desde las cortes y juzgados.
No se me escapa, sin embargo (y así lo he mencionado en varias ocasiones) que los que están ahí arriba son reflejo de los que estamos aquí abajo y que cualquier cambio que queramos instituír en el país tiene que venir de un cambio correspondiente entre las bases de la sociedad. Quizá por eso la nota que nos llegó esta semana desde el Centro Universitario de Ciencias Económico Administrativas (CUCEA) de la Universidad de Guadalajara me haya causado tanta molestia.
A través de un comunicado oficial, la insititución informó que investigará a 504 “alumnos” (sic) por irregularidades en el exámen departamental de contabilidad. Básicamente, estos personajes resolvieron un intricado exámen a distancia que requería de trabajo de análisis, planteamiento y solución a través de cálculo matemático… en menos de cinco minutos. Ah, por cierto, ninguno de los acusados tuvo un sólo error en el exámen; todos obtuvieron la nota perfecta.

Por más que el nivel educativo de la U. de G. no sea en absoluto despreciable y que su plantel académico tenga la experiencia y conocimientos necesarios para garantizar una educación de calidad, las cricunstancias y condiciones en las que se da el caso vuelven poco probable que todo se trate de un malentendido y que estos 504 individuos sean en realidad genios contables adelantados a su tiempo. Por lo mismo, la universidad empezó la investigación y aplicará las sanciones que considere convenientes. Según los mismos reglamentos universitarios, por esa falta podría ser hasta un año de suspensión.

Se presume que recibieron las respuestas a través de un grupo político dentro del plantel. ¿Qué grupo político, con qué ideología? Ni idea. Y si le parece correcto compartir las respuestas de un exámen de nivel universitario, mejor ni enterarme de qué proponen, no puede ser bueno.

¿Con qué autoridad moral pueden (podemos) exigir que la gente de arriba no robe, que el secretario de educación pronuncie correctamente “leer”, que los gobernadores de los estados no desvíen recursos a los partidos, que elijan con imparcialidad a un fiscal anticorrupción… si nosotros no caemos, desde nuestra trinchera, en prácticas igualmente reprobables? ¿Por qué esperamos que los de arriba sean derechos, si los de abajo no tomamos también esa responsabilidad de no andar por lo torcido?

Hoy no le toca reproche al gobierno, al que queremos achacar de todo el mal en México. Hoy nos toca reproche a nosotros.

Addendum:

Honor a quien honor merece. La semana pasada le tiré a la PGR por su manejo del caso Duarte. Al parecer, la audiencia del sábado fue todo lo contrario: el equipo del fiscal acorraló a la defensa del exgobernador e irán a juicio. Felicidades por un trabajo bien hecho, ojalá sigan así.

jueves, 20 de julio de 2017

El épico ridículo de la PGR

Ya habíamos tocado aquí el punto de que el caso Duarte era de vital importancia para la administración peñista. Que un expedito y transparente proceso harían maravillas por lavar (en parte) su legado en lo que a combate a la corrupción respecta y por reforzar la imagen de su partido de cara a 2018.
Esa era mi lectura del asunto, pero evidentemente la gente que decide piensa diferente.
En lo que fue el primer round de una batalla legal que promete ser larga (o quizá no, visto lo visto) la PGR hizo el absoluto ridículo en la audiencia inicial, o de imputación. En dicha audiencia, lo único que los tres agentes del ministerio público tenían que hacer era explicar por qué y con qué evidencia se demandaba a Javier Duarte; acaso responder algunas preguntas que la defensa pudiera tener para que ésta, en posteriores audiencias, pudiera preparar una defensa. No se pudo hacer ni eso.

La PGR acusa a Duarte del lavado de más de 438 millones de pesos. En la audiencia sólo pudo explicar con datos la salida de 38.5 millones de la Secretaría de Educación de Veracruz. ¿Y los desfalcos al seguro popular? ¿Y el montón de licitaciones amañadas para favorecer a empresas fantasmas y de prestanombres? Bien gracias.

Mientras el abogado defensor se frotaba las manos por el regalo envuelto que la Procuraduría le dejaba sobre la mesa; Gerardo Moreno García,  juez de control adscrito al Palacio de Justicia Federal en el Reclusorio Norte, apretaba los dientes. Los datos que presentaban los tres agentes del ministerio público ni siquiera coincidian con los que la propia Procuraduría le había facilitado hace unos meses, cuando solicitaron la orden de aprehensión.
“Cuando libré la orden de aprehensión, los fiscales que vinieron a exponer aquí el caso me proporcionaron datos de tres parcelas ejidales que ahora no corresponden con lo aquí planteado, No puedo fingir que no conozco ese dato. Los señalamientos de la PGR exhiben incongruencia”

Y es que esa es otra, es la tercera vez que la PGR presenta diferentes agentes del Ministerio Público en audiencias relacionadas con esta causa penal. Como si no hubiera una persona a cargo, y el caso símplemente se fuera deshaogando o rotando entre quien esté disponible en ese momento.

No está todo perdido, pero definitivamente es un tropiezo grave. Con veinte preguntas simples la defensa consiguió desbaratar los argumentos de la parte demandante. Ni siquiera necesitó presentar evidencia o documentos. ¿Así nos pide Gobernación que tengamos fe en la Procuraduría?

El sábado hay otra audiencia, esta vez para determinar si hay elementos suficientes para ir a juicio contra el exgobernador. Con este antecedente, si yo fuera mandamás, estaría verdaderamente preocupado (y ocupado) en no repetir el fiasco, en preparar a mis fiscales y armar un caso que pueda sostenerse. No debe ser tan difícil, cuestión de ordenar las ideas. El problema es ¿Lo harán? ¿O en lo que sería una terrible victoria para la impunidad el juicio del sexenio jamás llegará a tribunales? Habrá que esperar y ver.

jueves, 13 de julio de 2017

Coahuila ¿En 2018?

Ojo, Coahuila pudiera ser un avance de la película de terror que nos espera en 2018.
A un mes de las elecciones en esa entidad, el INE no ha podido esclarecer del todo las circunstancias en las que se dió la victoria del hoy gobernador electo Miguel Riquelme, del PRI. Son varias las rayas de ese tigre:

Para empezar, el mismo día de la elección el INE cometió el error de emitir un conteo rápido que daba como ganador al candidato del PAN, Guillermo Anaya. Dicho conteo, por diversas circunstancias, terminó calculándose con apenas el 55% de los datos muestrales esperados. No era un resultado oficial y debió desestimarse, pero en su lugar el detalle se convirtiió en la primera contribución al tufo de duda que se huele en toda la elección.

Luego, al acabar la jornada, resultó que el 23% (2,524) del total de los paquetes electorales fueron transportados desde las casillas hasta los centros donde se realizaría el cómputo “por fuera de los mecanismos logísticos previamente acordados”. Actualmente, el INE no ha podido determinar cuál fue la “cadena de custodia” para conocer quién entregó y quién recibió dichos paquetes electorales. Aún si queremos suponer que el contenido de dichos paquetes llegó sin alteración alguna, el INE ya no puede demostrarlo. De acuerdo con Acción Nacional, fue Fuerza Coahuila (la policía estatal) quien hizo acopio y entrega de esos paquetes. En un estado gobernado por el PRI ¿Entiende por qué la desconfianza?

Como al perro más flaco se le cargan todas las pulgas y a pesar de que el INE no necesitaba que lo ayudaran a meterse “en camisa de once varas” los partidos políticos también jugaron su papel en poner en entredicho la credibilidad del sistema electoral. Ambos candidatos punteros se declararon ganadores la misma noche de la elección, contribuyendo a la confusión.

Con el pasar de los días, además, la Unidad Técnica de Fiscalización de INE detectó que ambos candidatos habían rebasado los topes de campaña por aproximadamente la misma cantidad (5 millones de pesos, nomás), lo que, dado lo cerrado de la elección (la diferencia entre uno y otro candidato es de apenas dos puntos porcentuales) en estricta teoría daría pie a que se anularan los comicios.
INE
¿Y entonces qué? Preguntan. Pues nada, que se repetirían las elecciones, con candidatos distintos y en circunstancias bien distintas. Las elecciones nacionales están a la vuelta de la esquina y la verdad es que, gane quien gane Coahuila, la oposición política se frota las manos por la posibilidad de tachar a ambos partidos de corruptos y de manchar la legitimidad de la elección. Así que en el amplio panorama de las cosas, avanza la izquierda y tricolores y blanquiazules se arriesgan a perder por una rabieta mucho más que aquel estado al norte del país.

Con instituciones golpeadas, pocas alternativas y cartuchos quemados en las elecciones de 2018 ¿Dejo claro por qué creo que se trata de una película de terror?

jueves, 29 de junio de 2017

No crueles, justos

Los espacios públicos tienen una enorme desventaja frente a los privados. Esta es, que en su afán de ser “para todos” terminan siendo “de nadie”; espacios que nadie siente que le pertenecen y por lo tanto, con los que nadie siente una responsabilidad en cuanto a su cuidado y mantenimiento. Sencillamente, descargamos esa responsabilidad en “papá gobierno” y que él se haga bolas en cómo hacer que tengamos una ciudad bonita y de primer mundo.

Este lunes, algunos de esos espacios públicos del centro histórico de Guadalajara fueron vandalizados por dos adolescentes de 16 años. Además de la placa conmemorativa de la Plaza Tapatía y de la escultura de la cabeza de Quetzalcóatl ahí mismo, duele en particular la columnata frontal del Teatro Degollado, edificio emblemático de la ciudad con más de 150 años de historia a sus espaldas y que ahora luce en toda su fachada la palabra DARKNESS, escrita con graffiti.


Los responsables fueron sorprendidos infraganti, armados con quince latas de pintura en aerosol. Sin embargo, por su condición de menores de edad tienen asegurado enfrentar el proceso en libertad y no pisar la carcel, a pesar de que una ley federal, la de Protección a Monumentos Históricos, y una ley local que es el Código Penal, establece sanciones que van desde una multa, hasta diez años en el reclusorio. Si les va mal y el abogado defensor se ve torpe, les acomodarán una multa de veinticinco mil pesos y algunas jornadas de trabajo comunitario. Nada más.

Aún así, la madre de uno de los menores ya salió a declarar que se siente “afectada” por algunos de los comentarios vertidos por la ciudadanía en redes sociales.
"A mí me afectan mucho como mamá los comentarios, son muy duros, entiendo que hicieron algo grave, pero son demasiado crueles y mas a nosotras como madres"

¿Qué le digo, señora? Me da gusto que se sienta afectada. Discúlpeme, además, si no me importa demasiado. Es difícil no criticarla cuando usted no sabía qué estaba haciendo su muchacho y su amigo (ambos menores de edad), sólos, a las tres de la madrugada de un lunes (día escolar) en el primer cuadro de la ciudad. Todo esto es responsabilidad suya, señora, al menos en parte según lo establece la ley.

Para que haya espacios públicos de primer mundo en México hace falta una cultura cívica de primer mundo. Esa comienza en casa y, evidentemente, estamos muy, muy lejos de tenerla. ¿Por qué? Porque una cultura cívica implica aceptar una responsabilidad cívica, implica entender y tomar parte de que lo que es público y de todos es por extensión mío y que debo trabajar por su cuidado y preservación.

El caso de estos dos muchachos pudiera ser un buen ejemplo para empezar a entender eso; porque aunque a ellos los pescaron, son muchos los que se dedican a vandalizar espacios públicos, rayar automóviles, romper señalamientos, maltratar parques y plazas y tirar teléfonos públicos.. Estas personas cometen un crímen contra el resto de los ciudadanos al no respetar la propiedad de todos. Que el castigo no sea cruel, pero que sea justo e implacable. Cualquier otra cosa sería poner el beneficio de estos dos protocriminales (y el de los cientos como ellos que nunca atrapan) por encima del beneficio “público”, aunque me choque la palabrita.

jueves, 22 de junio de 2017

El Gran Hermano

Esta semana algunos periodistas, activistas y defensores de derechos humanos presentaron una denuncia formal ante la PGR. Alegan haber sido víctimas de espionaje digital por parte del gobierno federal; luego de que se dieran a conocer los resultados de una investigación realizada por tres organizaciones: Red en Defensa de los Derechos Digitales, Artículo 19 y SocialTIC. Les hackearon los teléfonos, vaya.
No es un caso aislado. Aparentemente, se trata ya de una actividad sistemática hacia quienes por sus posturas y poder de convocatoria, pudieran catalogarse como “incómodos” para el régimen. Así lo sostiene Mario Patrón, del Centro ProDH: “una práctica contra quienes [...] podemos poner en riesgo a quienes se sienten observados con nuestro trabajo desde la corrupción, la rendición de cuentas, el periodismo o la defensa de los derechos humanos”
Carmen Aristegui, Carlos Loret de Mola, gente de Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad o el mismo Centro ProDH estarían entre la lista de 88 casos confirmados.

1984 no debía ser un manual de instrucciones

La acusación es grave y pone a México en el ojo del huracán frente a diferentes organizaciones internacionales. Porque haya sido o no el gobierno el perpetrador de los hackeos, no está garantizado en México el más sencillo derecho a la privacidad. Eso, para la Alianza Internacional de Gobierno Abierto, por ejemplo, es inaceptable.

La Alianza es una iniciativa de múltiples paises que tiene como objetivo propiciar compromisos concretos de los gobiernos  para promover la transparencia, aumentar la participación ciudadana en los asuntos públicos, combatir la corrupción y aprovechar las nuevas tecnologías para robustecer la gobernanza.
México fue uno de los ocho países fundadores de dicha organización. El 20 de septiembre de 2011, el Presidente Felipe Calderón, presentó ante la Alianza el plan de acción de nuestra nación, donde se comprometía a: Aumentar la integridad pública, manejar más eficientemente los recursos públicos y aumentar la rendición de cuentas. En palabras del Presidente “esta iniciativa ayudará a fortalecer los lazos de confianza entre el Estado y los ciudadanos en México”

¡Qué cambio tan drástico en apenas seis años! De usar la tecnología para poner herramientas al alcance de la ciudadanía para auditar y vigilar al gobierno, a utilizarla para intimidar a los periodistas responsables de desenmascarar actos de corrupción o abusos de las autoridades.

México no puede permitirse dar un paso atrás en su lucha contra la transparencia y la rendición de cuentas (ya de por sí, con trabajos nos toca dar un paso adelante cada sexenio). No sólo por conservar la credibilidad frente a su ciudadanía, que ya sabemos que poco les importa, sino por cuidar su credibilidad frente a otros países.
La alianza la conforman 75 naciones y hasta ahora los únicos antecedentes son dos: El gobierno de Azerbayán (expulsado por violentar derechos de organizaciones civiles en mayo de 2016) y Hungría (expulsada en diciembre del mismo año por no respetar los estándares de transparencia establecidos por la organización) ¿Queremos sumarnos a la lista negra?

Ojalá el gobierno diera una respuesta más convincente a las acusasiones que tres tristes párrafos en donde se limita a decir “no hay pruebas”; obteniendo con ello el beneficio de la presunción de inocencia (es inocente hasta que se demuestre lo contrario) que, por ejemplo, no ofrece a sus propios ciudadanos. No levantemos el dedo del renglón, no podemos permitírnoslo.



jueves, 15 de junio de 2017

Hacer famoso al idiota

En México tenemos la desafortunada manía a considerar y convertir en héroe a quien no lo merece, a veces pasando por alto los méritos y trayectoria de personajes mucho más ejemplares. Ensalzamos a Juarez, rebajamos a Díaz. Celebramos a Zaragoza, relegamos a Miramón. Desconozco la razón de por qué Guillermo González Camarena no es visto como un verdadero ejemplo moderno de mexicanidad; o porque no hay más niños queriendo ser como Mario Molina o como Rodolfo Neri Vela.

¡Ah, sí! ¡Porque agarramos de ejemplo a “La Mars”!

Algo terrible está sucediendo en nuestro país si de repente “YouTuber mexicana de 16 años anuncia que deja la prepa” es un titular con el que Milenio puede publicar una nota y considerarla “noticia”.
Para quienes no conocen a la chica, Marcela Aguirre originaria de Baja California, publicó hace tres meses un video en el que anunciaba, con florido lenguaje, que abandonaba la preparatoria para no ser una “oveja más del sistema” y “luchar por sus sueños”. El video tiene actualmente más de siete millones de reproducciones y generó reacciones a favor y en contra. Supuestamente, también, avivó el debate sobre el sistema educativo en México.

Bien, que cada quien haga de su vida lo que quiera. Pensé yo mientras dejaba pasar la nota. Pero no estaba de acuerdo con la perspectiva de esta chica.

Es cierto. Bill Mates, Mark Zuckerberg, Steve Jobs, Oprah Winfrey; todos ellos abandonaron la universidad, persiguieron sus sueños y gozan (gozaron) de un trabajo apasionante y muy redituable. Pero son la excepción y todos corrieron con una suerte extraordinaria.
En un estudio realizado en nuestro vecino país del norte y publicado en septiembre de 2016, se investigó a casi doce mil líderes, CEO’s, jueces federales, políticos, multimillionarios y líderes de negocios. Resultó que 94% de ellos habían ido a la universidad, 50% a una de las consideradas de élite (Ivy League) Entre los enlistados de Forbes, ese número sube hasta 80%.
El mismo Bill Gates ha recnocido por escrito que sus circunstancias fueron extraordinarias y que conseguir un título es un camino mucho más seguro al éxito, a mejores y más apasionantes trabajos y a una vida más feliz.

Pero no, en México “La Mars” saltó a la fama y se la considera ahora una “Influencer”.Una persona que por su presencia e influencia en redes sociales puede llegar a convertirse en un prescriptor interesante para una marca. ¿Quieren saber qué hizo esta “Influencer” esta semana? Subir un video en donde se mete un preservativo por la nariz y lo saca por la boca. No, no es broma, ese es el tipo héroe que México tiene en esta época posmoderna. La llaman visionaria, empoderada. Yo lo siento mucho, no hay manera de verse empoderado con un condón saliéndote por la fosa nasal y no entiendo cómo la acerca eso al sueño que pretendía alcanzar hace tres meses.
Chavos, quizá crean que hacer como que la vida les importa un comino los hace ver geniales, progresistas. No es así; más bien los deja en evidencia. Una vida en la que uno no defiende nada, ni persigue nada es una vida vacía. En palabras de Dostoievski: “El secreto de la existencia humana no solo está en vivir, sino también en saber para qué se vive" Luchen, aprendan, no desdeñen el consejo de sus padres, que llevan más camino andado.
Dejemos de reverenciar al idiota. Más Neris, menos Rubís. Más González Camarena, menos LadyWuu. Más Marios Molina, menos “Mars”




jueves, 8 de junio de 2017

Drama post electoral... otra vez.

En este espacio me he cansado de abogar por el individuo y su poder transformador, por que dejemos de ver y esperar mesías entre la clase política y comencemos a responsabilizarnos de nuestras circunstancias y entorno. Por lo mismo no quería y lo hago bajo protesta hablar de las elecciones del pasado domingo. Me parece que es darle importancia al circo que se han montando, que sin importar lo que ellos digan no tiene nada que ver con defender el voto y la voluntad de los mexicanos.

Desde mi perspectiva, lo mismo da que al final se quede con el pastel el PRI, el PAN, Morena o cualquier otro. Todos son uno y lo mismo: parte del problema, no de la solución; puertas falsas y promesas vacías; buitres midiendo fuerzas para ver quién se queda con la mejor parte del moribundo.
¿No me cree? Si el objetivo es defender el voto ¿Por qué Acción Nacional, que tachaba de anti-democrático y mal perdedor a López Obrador, ahora usa estrategias similares para desestabilizar la victoria del Revolucionario Institucional en Coahuila? Si el objetivo es defender el voto ¿Por qué ambos, Martí Batres y Alejandro Encinas, mienten con la misma foto y jalan agua para su molino en redes sociales para generar descontento y polarizar al país? ¿Por qué se ha vuelto costumbre en todas las contiendas electorales que ninguno de los participantes espere y respete, según manda el deber cívico, a que la autoridad electoral revise y valide el ejercicio y nombre un ganador oficial?

¡Milagro! ¡La misma foto y la misma sábana como evidencia en diferentes municipios del EdoMex!


¿Por qué nos abrazamos tanto a una figura que nos es lejana y ajena (como la del candidato) que sentimos la necesidad de injuriar a quien nos es cercano y familiar (como el vecino) si no comparte nuestro punto de vista? ¿Por qué hacemos nuestros los colores de gente a la que  ya lo decíamos en la entrada anterior, le importan tres hectáreas del producto agrario que usted prefiera la ideología que tenga que defender o los valores del partido que lo ponga en el curul?

Así que ¿quién ganó, quien tranzó, quién lleva la razón? No pienso entrar al debate. Las circunstancias inmediatas de la gente de Coahuila o del Estado de México no van a cambiar de inmediato con la alternancia política. Porque lo único que cambia es el color de la capa del vampiro que sangra los bolsillos y las carteras de los ciudadanos.

Entonces ¿No hay nada que hacer? Si, se puede, pero es un proceso más largo. Coincide que esta semana nos dieron ejemplo de cómo hacerlo.
A través del esfuerzo y la presión social que ejerció la ciudadanía, en Jalisco aprobaron la iniciativa #SinVotoNoHayDinero, presentada por el diputado local independiente, Pedro Kumamoto. Ya había explicado sus virtudes en otra entrada, así que me limitaré a decir que es una manera en la que le quitamos poder a los partidos políticos, o al menos, los obligamos a ver más al elector, a ser más convincentes.

Iniciativas como esa, que le quiten poder a los organismo nacionales, lo descentralicen y se lo devuelvan a la gente es lo que hace falta. Porque ya se ve que nuestro voto, lejos de ser nuestra arma más efectiva y modo de control, se ha vuelto un miserable trámite.

Cambiemos las cosas.

jueves, 1 de junio de 2017

Como mafia...

Morena financia sus campañas ilegalmente con recursos públicos, acusó Eva Cadena en conferencia de prensa ayer miércoles por la mañana. En otras noticias igualmente impactantes, el agua es húmeda y moja.

No, en serio, está muy bien que la ex-candidata a presidenta municipal y todavía diputada del Congreso de Veracruz esté públicamente denunciando lo que está pasando al interior de su partido. Pero es ilógico pensar que ella es inocente en todo el asunto, y el hecho de denunciar no la exime de pagar las consecuencias.
Que a nadie se le escape que esta señora tiene ya sus años recorridos en la política (colgándose cualquier bandera que le acomode: PAN, PRI, PRD y ahora Morena) y que no es la primera vez que la pescan en circunstancias sospechosas. (Ya desde 2008 habían encontrado un recibo firmado de su puño y letra donde se comprometía a pagar 240 mil pesos a cambio de una regiduría en el Ayuntamiento de Las Choapas).

Alega que fue víctima de una trampa ¿Cómo es posible, pregúntome yo, que una persona con tanto callo político, haya caído en una trampa tan inocente y burda? Discute que Morena recibe dinero de los “bonos” que sus diputados “no reciben”; pero como diputada por Morena desde el 5 de noviembre de 2016, ella debió enterarse y participar de tal maniobra. ¿Por qué hablar hasta ahora, si tanto le repugna el acto?


Me huele a mí, por la lógica del párrafo anterior y por algunas de sus declaraciones (“Mi partido, Morena, cuando más lo necesitaba me dejó sóla” dijo) que aquí hay un dejo de resentimiento. Estaba muy contenta con el arreglo y perfectamente enterada de lo que Morena hacía, pero en cuanto algo se torció, la sorprendió verse desprotegida y abandonada a su suerte. De ahí su enojo, de ahí sus declaraciones punzantes.

Hay que reconocerle ingenio a la estrategia de López Obrador. Morena permanece intachable a como dé lugar, sacrificando con saña a quien se tenga que arrojar debajo de las ruedas de la prensa y el escarnio público con tal de que el partido (y su presidente) lleguen bien posicionados a 2018. Cual mafia: Si te pescan, no sabemos nada de ti y te dejaremos morir solo.
Eva Cadena puede ser un ejemplo, pero Carmen Aristegui puede ser otro igual de válido.
Durante mucho tiempo Carmen ha fungido como una figura cuestionadora del régimen, contribuyendo con ello al discurso lopezobradorista. Sin embargo Carmen, haciendo su labor periodística, cometió la imprudencia de preguntarle a López Obrador por el apoyo de Elba Esther Gordillo a su candidata en el Estado de México. El tabasqueño de inmediato se mostró incómodo. “¿Por qué no le preguntas a Yunes?” dijo. La cosa no mejoró cuando se refirió a Juan Zepeda (candidato perredista) como “un ambicioso vulgar” y Cármen lo remató “¿Así le dices al que le pides que decline por Delfina en el estado de México?”

Morena no es un partido tradicional (y no, no me refiero a que sean particularmente honestos) es una estructura montada para permitirle a Andrés Manuel llegar a la presidencia y presumir músculo político. Y en esas circunstancias, sólo uno puede ganar: él. Y nadie lo sabe mejor que Óscar González,  ex-candidato por el PT, que, un día antes de declinar a favor de Delfina (Morena) echó pestes del tabasqueño precisamente por su forma tan poco amable de buscar una alianza entre ambas organizaciones políticas, gritándoles “paleros” en una plaza pública, acusándolos de estar “al servicio de otro partido”

López Obrador no es quien dice ser, ni la imagen que pretende proyectar. Para muestra, los botones que aquí exhibo; la manera de conducirse de su partido. (¿Sabía usted que en el cierre de campaña de Delfina en el Estado de México, la candidata habló 9 minutos y el presidente del partido 2 horas?) Ojalá abramos los ojos a tiempo, la evidencia se está acumulando, pero no sería la primera vez que decidimos ignorarla.



jueves, 25 de mayo de 2017

Crisis de Identidad

Lo invito, querido lector, a hacerla de jurado en un pequeño juicio imaginario. Yo tomaré el papel de fiscal y expondré mi caso. La defensa, aunque no podrá ocupar este espacio, tendrá algunos meses de aquí a las elecciones de 2018 para argumentar. ¿Le parece interesante el ejercicio? ¡Vamos allá!  

Yo acuso, damas y caballeros del jurado, que las organizaciones políticas del país ya no son “partidos” (si es que alguna vez lo fueron) sino escenarios donde, uno a uno, se pasea el político en turno bajo los reflectores. ¿Para qué? Para ver si consigue enamorarnos con un complejísimo acto de malabarismo político y engaño y se hace con un “hueso” el próximo periodo electoral. A fin de soportar la acusación, comienzo a presentar evidencia.

Partido, según el diccionario de la Real Academia Española:
5. m. Conjunto o agregado de personas que siguen y defienden una misma opinión o causa.

Según el diccionario de Google
1. Organización política formada por un grupo de personas que comparten y defienden las mismas ideas y que toman parte en la política de un país.

Qusiiera dirigir su atención al punto crítico de ambas definiciones. Se habla de un grupo de gente que apoya una idea, una visión. La definición de la RAE ni siquiera menciona “hacer política” como el fin de estas organizaciones.
¿Qué hacen, en contraste, los “Partidos” en México? Claramente, defender una idea no es su prioridad. Miremos del lado izquierdo del espectro político. ¿Cuántas agrupaciones hay ahí, defendiendo en teoría lo mismo, pero separadas por intereses particulares? Miremos al Partido Verde, o a Nueva Alianza que se acomodan según les venga mejor. ¿Qué defienden estas instituciones más allá de los privilegios de sus dirigentes? ¿Qué hacen Rosario Robles, Porfirio Muñoz Ledo, el mismo Andres Manuel y muchos otros chapulineando de un partido a otro?

Pongo los reflectores ahora sobre la nota de la semana, el supuesto “frente amplio” del PAN y el PRD que muy orondos salieron a presumir tanto Ricardo Anaya como Alejandra Barrales (presidentes de una y otra institución).  Que ambas agrupaciones estén dispuestas a dialogar para alcanzar acuerdos, me parece muy bien, pero difícilmente algo meritorio de una rueda de prensa como la que se aventaron. Ahora, que pretendan hacer una propuesta conjunta en 2018 lo encuentro más preocupante, porque se trata de organizaciones que ideologicamente están en las antípodas unas de otras.


Recuerdo con una sonrisa las respuestas que le propinaron a Ricardo Anaya luego de un desafortunado comentario en Twitter. Él se refería a la victoria de la opción moderada en las elecciones de principios de mes, en Francia:

“Un joven de 39 años llega a la presidencia de Francia derrotando a la extrema derecha. Muchas felicidades a Emmanuel Macron y a Francia.” escribía en la red social.

No es difícil adivinar cómo se ve proyectado en esa línea, como al enunciarlo así refuerza su propio interés en que un “joven” como él llegue al poder. Por eso las respuestas son tan maravillosas. Hubo que recordarle a Anaya que, en México, es el PAN el que representa a la extrema derecha, que entre su militancia tiene a varios miembros de la Organización Nacional del Yunque. ¿Qué demonios hace tratando de construir un proyecto conjunto con quienes tienen opiniones opuestas en todos los puntos importantes?

Señoras y señores del jurado, los hemos perdido por completo. Todo esto hace evidente nuestros partidos están secos de identidad, secos de ideología… y si están faltos de eso no podemos pedirles a sus candidatos ideas inteligentes, ya no digamos novedosas. No saben ni lo que son, ni lo que representan, lo único que les interesa es hacerse con el puesto en disputa.
En vista de lo aquí expuesto, y ya con esto termino, la fiscalía pugna por el abandono de cualquier tipo de apoyo a estas instituciones que, como no saben qué defienden, tampoco pueden representar al pueblo de México. Ahora es el turno de la defensa, veamos si pueden desmentirme.


jueves, 18 de mayo de 2017

Libertad prensada

El 3 de mayo se celebra el Día Mundial de la Libertad de Prensa. Establecido por la Asamblea General de las Naciones Unidas, el objetivo del mismo es, en palabras de la UNESCO: informar a los ciudadanos acerca de las violaciones a la libertad de prensa [...] recordarles que en decenas de países alrededor del mundo las publicaciones son censuradas, [...] mientras que periodistas, editores y publicadores son acosados, atacados, detenidos e incluso asesinados. Es una fecha para fomentar y desarrollar iniciativas en favor de la libertad de prensa”

Viene al caso porque el pasado lunes Javier Valdez Cárdenas, colaborador de La Jornada y fundador del semanario Ríodoce, perdió la vida cuando sujetos encapuchados lo interceptaron en el centro de Culiacán y le abrieron fuego contra él. El comunicador llevaba tres meses recibiendo amenazas de muerte y su caso se suma a los de otros cinco periodistas que han fallecido en lo que va del año.
Unas horas más tarde, ese mismo día, se hacía un intento por quitarle la vida a Sonia Córdova, subdirectora del semanario “El Costeño” en Jalisco. Sobrevivió de milagro. Su hijo, que la acompañaba, no corrió con tanta suerte.

Ejercer el periodismo en este país se ha convertido en un deporte de alto riesgo, un oficio que requiere redaños y mucha vocación. Quizá ya no se tiene la ley mordaza evidente de los tiempos de la dictadura del PRI, pero aún hay una amenaza velada para el que incomoda con preguntas. El caso de Javier Valdez es un raya más a un tigre que, desde el año 2000, ha acumulado más de 100 en su colección. ¿No me cree?

Artículo 19 (organización internacional en favor de los derechos humanos; en concreto de la libertad de expresión y el derecho a la información) señala que de las 800 investigaciones indagatorias que ha abierto la ​​​​​Fiscalía Especial para la Atención de Delitos cometidos contra la Libertad de Expresión en los últimos seis años, sólo se han resuelto tres. Sí, tres. El 99.75% siguen en el limbo y los culpables sin castigo. Permanezca sentado, aún hay más. De todas las incidencias documentadas en 2016, más de la mitad fueron perpetradas por agentes del Estado.

Habrá medios parciales e imparciales, de corte liberal o conservador; habrá periodistas con cuyas ideas no comulguemos, columnistas de quienes no nos perdamos ninguna entrega y a otros con los que nos baste mirar su foto impresa para ponernos de malas y está bien. La pluralidad de ideas es importante. La libertad de expresión es piedra angular de la democracia.   



México necesita a sus periodistas. Los necesita como primera línea de defensa contra la corrupción, como investigadores y escrutadores del actuar de políticos y funcionarios, como desenterradores de la verdad al servicio de la población.
Pero si los periodistas son la línea de infantería de reconocimiento, nosostros, la sociedad civil, debe de actuar como el resto del ejército y arroparlos apenas descubran algo, obligar a los implicados en el escándalo a responder por lo que hicieron y no dejar sólo al batidor para que una bala perdida lo silencie.

Está en todos.